a pepiñeaux
Remedios para la normalidad, pregona la farmacéutica del barrio a quien quiera oírla en la calle.
Muele avisos clasificados en el mortero del abuelo Aurelio, destila nombres y direcciones para los amores cruzados, mercancías para los que quieren salir de pobres y máquinas de hacer pájaros para todos los mortales, quien beba el elixir será inmortal o al menos tendrá la ilusión de levitar. Con la sección de artes y espectáculos destila el frenesí de los que buscan planes para salir a encontrar mundo.
Elsa Castro no sueña o ignora lo que le dice la noche en la boquita de su almohada, como ignorar es no existir, inventa remedios para los males que no curan los galenos ni en los sueños, ellos no saben qué recetar para las malas noticias o la ausencia, ignoran como se curan las palabras anudadas por la boca y por la cola.
Destila elixires moliendo diarios, cotidiana es la cura y periódica la enfermedad.
Muele avisos clasificados en el mortero del abuelo Aurelio, destila nombres y direcciones para los amores cruzados, mercancías para los que quieren salir de pobres y máquinas de hacer pájaros para todos los mortales, quien beba el elixir será inmortal o al menos tendrá la ilusión de levitar. Con la sección de artes y espectáculos destila el frenesí de los que buscan planes para salir a encontrar mundo.
Elsa Castro no sueña o ignora lo que le dice la noche en la boquita de su almohada, como ignorar es no existir, inventa remedios para los males que no curan los galenos ni en los sueños, ellos no saben qué recetar para las malas noticias o la ausencia, ignoran como se curan las palabras anudadas por la boca y por la cola.
Destila elixires moliendo diarios, cotidiana es la cura y periódica la enfermedad.
Una vez a falta de diario, molió el i ching sin saber porque, ni que sanaría su fórmula, después de desechar tres monedas de bronce, lo supo; no saber hacer preguntas es un mal y no entender las respuestas es una epidemia.
Elsa Castro en cruzada sanitaria, desdudó a miles de vecinos mientras pagaban sus cuentas en mates cebados.
La boticaria se hizo próspera en depósitos de yerba mate.
Elsa Castro en cruzada sanitaria, desdudó a miles de vecinos mientras pagaban sus cuentas en mates cebados.
La boticaria se hizo próspera en depósitos de yerba mate.
Una farmacity la desbarrancó en el oficio, la gente curaba sus ansiedades de amor comprando cremas para la cara, las dudas se lavan con champú y el dolor de mundo con ibuprofeno Elisium 400 mg.
6 comentarios:
Algunos dolores no tienen analgésicos, ni soluciones, ni respuestas... son como las dudas existenciales... aparecen de repente y nos carcomen la vida.. de por vida...
Un place volver a leerla mi Teodora
voy a tener que pasar por aca con ma stiempo cuantas cosas hermossas !!!! vuelvo....
que liiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiindo!!!!!!!!
me encantan las modificaciones, los textos, los dibujos, todo!
Te quiero teodora y te extraño! Nos vemos mañana!
oh!
vuelven las historias minimas
ya estan aqui
esa farmaceutica tenia la farmacia cerca de donde yo trabajaba
y me convidaba mates
y me daba pepas para que los horoscopos me salgan bien
saludoss!
estos pequeños relatos son taaan teodorísticos!
que lindo está todo por acá, a mi me gustaría que esta semana nos juntemos!
les va?
dos cosas:
una, Elsa vendía droga.
dos, hay que armar una pueblada y romper todos los farmacity
y ya está =)
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