Los cuerpos se habían desvanecido y solo quedaban las palabras, los relatos que persisten el tiempo, las inclemencias, el invierno, diálogos que quedan suspendidos esperando. Los cuerpos se desvanecían y seguíamos reuniéndonos en ese no estar ahí estando, permaneciendo en esos lugares que nos arman las palabras.
La casa invita. Elijan la música.
6 comentarios:
pero qué geeeeeeeeeenia!! jajaja
te juro que estoy oyendo conversaciones entre seres metafísicos (y les respondo, me hacen reir, me conmueven).
un psiquiatra nos encerraría, menos mal que hemos tomado la humilde precaución de ser palabras sin cuerpo (salvo que... "las palabras se hacen puta carne")
hagamos que lo diálogos no sigan esperando y nos unamos...
la musicalización podría ser algo de drexler, siempre drexler... podría ser serrano pero en estos días me pone demasiado triste, aunque espero ansiosa su llegada...
salud!
por unos mates y juntada!
faaaaaaaaa pero que hermosura de sillassssss !!! en las vacacioesn nos juntemossss jaja yupiiiiiii besos
como dice romina
se escuchan las voces de las almas hablar
el second life de blogspot empieza en la casa de teodoradorna
saludos!
jajjaa gracias por los piropos me hiceron poner coloradas hasta las orejas. luc ya mande en un camion de ogistica un paquete de sillas. jaajaja
yo opino que para que este invierno sea mas cálido, una marisa monte me haría pensar en el mar y en el sol.
o podemos tomar unos mates al sol.
y sacr los sillones al patio...
Publicar un comentario