Días cualquiera, días imprescindibles, días quebrados, días verdes, días y más días.
Los llevas de a montones, enrollados, en cajas, en paquetes, sueltos con la hora de la tarde de cara al viento.
Los llevas ordenados o revueltos; por azar, por contingencia, por ganas, por hastío.
Hay días pesados que te parten la espalda, hay días donde el cuerpo se te hace pez y sos leve.
Esos días te dejas flotar en el río para que a la hora de la tarde, el viento se haga azar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario